La norma principal para obtener una espuma de leche fina y cremosa es la temperatura de la leche, que debe estar entre los 4 y los 8ºC.

El tipo de leche usada y su contenido en grasas no son de gran importancia. La proteína contenida en la leche es la responsable de la consistencia de la espuma de leche, y no las grasas. Leche entera, leche baja en grasas, leche de cabra o de oveja – todas estas leches pueden utilizarse para obtener una buena consistencia de espuma de leche.

Incluso la leche de soja puede ser espumada. Naturalmente el sabor de los diferentes tipos de leche variará, y es un tema de gustos elegir la leche con la querrá preparar su especialidad preferida de café con leche.